SEXO, EROTISMO Y ¿PORNOGRAFÍA? EN RELIEVES ROMÁNICOS

                                                               Fuente:https://www.arteguias.com/catedral/colegiatacervatos.htm Relieves de San Pedro de Cervatos, Cantabria.


        Viajando por la cornisa norte de España y otras zonas relacionadas con las peregrinaciones y diversos lugares de Europa, como Francia, Alemania o Irlanda, se pueden ver construcciones románicas en las que hay abundantes relieves tallados, una nueva marca de la época cercana al año 1000, con los que se pretendía ilustrar en el dogma cristiano a una población abrumadoramente analfabeta.Sin embargo, en las zonas arriba mencionadas podemos ver también unos relieves que podríamos calificar de "chocantes" por el lugar en el que se ubican, aunque habrá gente que los tache directamente de pornográficos, ya que muestran una gestualidad sexual bastante explícita de sexo anal, onanismo, exhibicionismo, coitos placenteros, etc, que parece estar en contradicción con la postura de la Iglesia respecto al sexo. Puede que no fuera siempre así, y por ello, creemos que merece la pena investigarlo. 

    1.- EL ROMÁNICO.
                                                                                                                 Colegiata de Santa Juliana. Santillana de Mar. Foto: Alba Hernández 

    Alrededor del año 1000 las condiciones sociales y económicas eran terribles, unos tiempos oscuros y turbulentos marcados por la falta de alimentos y la abundancia de plagas y calamidades. El Apocalipsis de San Juan vaticinaba el fin del mundo, y las gentes de la época interpretaron que llegaría en esa fecha redonda; la sensación de catástrofe inminente se apoderó de las mentes de la época. Sin embargo, al pasar el año 1000 y ver que nada de ello había sucedido, y que incluso las condiciones económicas mejoraban con los avances técnicos implementados en la agricultura (collera rígida, arado con rueda, reja disimétrica o la rotación trienal de los cultivos ), se generó un clima en el que la confianza y las ganas de agradecer a Dios que el mundo siguiera su curso, y a los santos las gracias concedidas, llevó a que las peregrinaciones se convirtieran en un fenómeno creciente. 

        Se comienza a construir iglesias que, por primera vez, siguen unos patrones artísticos comunes, como el uso de la piedra, la cubierta de bóveda de cañón, la aparición del deambulatorio y la escultura de tema religioso. Para este renacer arquitectónico y escultórico fue fundamental la recuperación del trabajo de la piedra, y los canteros se constituyeron en el colectivo que más se movió a lo largo de estos años, dejando su arte en iglesias y relieves que, a día de hoy, todavía nos interpelan. 

  La decoración escultórica en las iglesias románicas comienza alrededor del año 1060 en Borgoña y en el noroeste de la Península Ibérica, con San Martín de Frómista y San Pedro de Jaca como sus primeras manifestaciones. El románico toma su nombre del mundo romano, pero a diferencia del realismo o el deleite estético como sus objetivos, el románico busca transmitir enseñanzas morales, y por ello, esta escultura es desproporcionada y se nos aparece como grotesca y se ubica en todas las partes del templo: es un libro abierto para que todo el mundo pueda leerlo y entenderlo, no disfrutarlo. Pero ¿qué enseñanzas morales transmiten los relieves que nos ocupan?

 2.- UNOS RELIEVES DIFERENTES.

              Relieve de San Pedro de Cervatos, Cantabria. Fuente:https://www.arteguias.com/catedral/colegiatacervatos.htm

    En la Iglesia de Santillana del Mar, en el interior del templo, se puede ver a una mujer acariciando el enorme pene de un hombre; en San Quirce de los Business (Burgos), un hombre excitado llama a una mujer desnuda; debajo del pene se puede leer "Io", como si el cantero se hubiera reflejado a sí mismo de esa guisa. En la Iglesia de Villanueva de la Nía, también en Cantabria, una mujer exhibicionista mira desde el arco central a los feligreses, y otra al sacerdote. El templo más ampliamente decorado con estos curiosos relieves es San Pedro de Cervatos, en Cantabria, del que proceden estas imágenes recogidas en el enlace que se indica debajo de las mismas. La amplitud y variedad de posturas y gestos, así como lo explícito de los mismos, entra en contradicción directa con la doctrina de la Iglesia, y podríamos encuadrarlo dentro de la pornografía.

                  Relieve de San Pedro de Cervatos, Cantabria. Fuente:https://www.arteguias.com/catedral/colegiatacervatos.htm

    En estos relieves destaca la representación de falos de tamaño exagerado, incluso la representación de los mismos aislados, sin humano que los porte. Hacemos esta especificación porque será importante para las interpretaciones que hilvanaremos con posterioridad. También hay escenas de mujeres pariendo, así como mostrando una vulva muy abierta y de dimensiones  descomunales.

Imagen de Sheela - na - Gig de Kilpeck. Fuente: Wikipedia

       Estas figuras femeninas desnudas, de inquietante sonrisa y vulva muy abierta con ayuda de sus manos - que a veces asemejan garras - están ampliamente extendidas por Irlanda y Gran Bretaña, siendo la de Kilpeck, en Herthforside, la más representativa, aunque también las encontramos en las iglesias románicas españolas de las que ya hemos hablado. En Irlanda y Gran Bretaña se encuentran en zonas conquistadas por los anglo-normandos.
       La pregunta que nos hacemos viendo estos relieves es cómo se podían ubicar en las iglesias, y cuál es la enseñanza moral que transmiten. La Iglesia cristiana toma como texto sagrado la Biblia, y de ella deriva su moral; los Padres de la Iglesia interpretaron y difundieron la visión canónica acerca de todos los asuntos relacionados con el hombre. Concretamente respecto al sexo, es San Agustín quien imprime una visión distinta a la de la Antigüedad clásica, ya que él lo asocia al pecado original, cuando Adán y Eva iban desnudos, y tras incumplir la orden de Dios, se sienten avergonzados de su propia desnudez, y el deseo sexual se ve como algo que hay que reprimir porque nos lleva a contravenir las órdenes de Dios. Destaca también desde entonces la asociación de la mujer como la que tiene mayor parte de culpa, por desobedecer a Dios y por hacer caer a Adán. Esta visión está ampliamente contestada en la actualidad desde el feminismo, y hay algunas revisiones de esta interpretación desde la literatura muy interesantes, como la que plantea Ursula K. Le Guin en el relato corto "She unnames them".

                                      Ursula K. Le Guin. Fuente: https://www.vulture.com/2018/01/ursula-k-le-guin-dead-at-88.html

              Esta asociación de sexo y pecado que arranca con San Agustín se deshace con la Reforma Protestante de Lutero, en el año 1517, ya que él interpreta que el sexo es un don de Dios, pero siempre y cuando se practique dentro del matrimonio.


              Dentro del cristianismo la finalidad de la sexualidad es la procreación, y por ello no se acepta el placer sexual, el sexo por el sexo. Sin embargo, el matrimonio no pasó a ser considerado un sacramento como el bautismo o la comunión hasta el año 1184, cuando el Papa Gregorio VII lo instituyó como tal. En su Dictatus Papae, este pontífice emprende una ambiciosa reforma eclesiástica que busca, entre otros objetivos, acabar con el nicolaísmo, o la unión del clero con las mujeres, y preservar el patrimonio de la Iglesia para mantener su poder dentro del orden feudal. Por ello, la regulación del matrimonio se convierte en el foco, ya que hasta bien acabado el siglo IX, esta institución era un acto civil y consuetudinario en el que se firmaba un contrato entre dos familias con la transmisión de patrimonio como eje central. Con la regulación del matrimonio emprendida por Gregorio VII se prima la familia nuclear frente a la extensa y se evita la diseminación del patrimonio entre parientes colaterales; con ese mismo fin se prohíben las uniones consanguíneas y entre parentela afín. Se prohíbe asimismo el matrimonio de los sacerdotes y con ello no tener que dar en herencia el patrimonio de la Iglesia.  Además, con la institución del matrimonio como sacramento y su revestimiento de santidad, se regula también el ámbito privado de la sexualidad, estableciendo una "normalidad" heterosexual orientada a la procreación y un rechazo del placer y la lujuria, del sexo fuera del.matrimonio, del sexo placentero, la masturbación, la prostitución, la pornografía....
       Entonces, ¿cómo podemos entender la presencia de los relieves eróticos en los templos cristianos? ¿Podemos calificarlos de pornográficos?

     3.-  UNA APROXIMACIÓN ANTROPOLÓGICA A LA PORNOGRAFÍA.
                                 
                                           FUENTE: https://cozomatli.wordpress.com/2014/09/24/breve-historia-del-erotismo-en-grecia/

       Dentro de los cursos de verano de la UNED de 2019, el profesor Lorenzo Mariano Juárez impartió una charla acerca de lo que se entiende desde la Antropología acerca de los "cuerpos pornográficos", en la que reflexionaba acerca de lo que implica hablar de pornografía sustentando los argumentos con imágenes: la censura se impone, como en este apartado a la hora de ilustrarlo con una imagen: debe ser algo que se entienda como pornográfico pero que al mismo tiempo no hiera las susceptibilidades, puesto que se dirige a un público muy amplio. Seguimos entonces preguntándonos cómo los artistas medievales no ejercían ningún tipo de autocontrol, ni la misma Iglesia sancionaba la ejecución de sus obras.

       El profesor Mariano Juárez comienza su aproximación a la pornografía desde la definición de la misma, que se entiende de diferentes formas:

 1.- Es una presentación abierta y cruda del sexo que busca producir excitación.

 2.- Espectáculo, texto o producto audiovisual que usa la pornografía.

 3.- Tratado acerca de la prostitución.

Y como último aspecto, señala la gratuidad del sexo: no hay contexto de referencia.

Por su parte, la Iglesia católica alude a "una sustracción de la intimidad de los sujetos o actos sexuales reales o simulados, con el propósito de mostrarlo deliberadamente a terceros".

      Lo que se entiende por pornográfico ha cambiado a lo largo de los siglos, y un acto sexual en la intimidad de un cuarto es algo que no se podía dar en la Edad Media, con unas viviendas minúsculas compartidas por un elevado número de personas; también la forma de interpretar la desnudez ha sufrido una evolución a lo largo de la historia. Por lo que respecta a las representaciones de prácticas sexuales, el mundo antiguo es muy prolífico en ellas: hay relieves de explícito sexo anal en Babilonia; coitos en petroglifos de China (año 3000 a. C.), relaciones en estatuillas de la cultura Moche, amplia gama de posturas y situaciones sexuales en Grecia o en las pinturas de Pompeya. Sin embargo, todas estas representaciones no son para el común de los mortales sino que se hallan en contextos pensados para el disfrute de una élite, y no será hasta el siglo XVIII cuando el sexo se hace más generalizado, más abierto y comienza la literatura pornográfica. Desde el siglo XIX, con la aparición de la fotografía y los avances técnicos y urbanísticos, el sexo y la pornografía se convierten en una industria con la contrapartida de la moral victoriana, pacata y restrictiva; la conversión en industria del sexo se da, según Foucault, en el siglo XX, convirtiendo el cuerpo y la sexualidad en medios para el placer y/o la reproducción, como objetos de consumo, presentados como siempre disponibles y separados de toda otra experiencia humana. No hay aquí una separación entre lo pornográfico y lo artístico.

                                              Fuente:http://eltranvia48.blogspot.com/2015/05/las-salas-x-de-barcelona-1984-2004.html

       Tras estas ideas , podemos ver que los relieves románicos que nos ocupan, pueden ser entendidos como pornográficos desde el punto de vista más contemporáneo en el que son parte de una industria que mezcla las representaciones del sexo, del cuerpo con lo artístico, pero la cualidad que no comparten es la de estar alejados de un contexto: su contexto son parroquias, templos en los que se predica una enseñanza moral que contradice lo que los relieves muestran. Por ello, podemos decir que los relieves no son pornográficos, por lo tanto, debemos buscar otras explicaciones para ellos.

   4.- POSIBLES INTERPRETACIONES

     La interpretación que surge de manera más inmediata es la de que estas imágenes son la representación de los pecados que llevan a los hombres (en sentido extensivo de lo humano) a la condena al infierno o al purgatorio, y los alinean con las representaciones de avaros colgados por demonios con una bolsa de monedas al cuello; se encuentran en pórticos en los que se representan el cielo, el purgatorio y el infierno. Sin embargo, no todos estos relieves están en estos lugares, sino que pueblan canecillos, ábsides y paredes interiores, desprovistos de contexto infernal. Por ello, no podemos mantener esta explicación como la única posible.

      También se interpretan como una muestra de la jocosidad de los canteros , que los pondrían en lugares escondidos, una especie de grafiti gamberro de los artistas. Pero recordemos que no están circunscritos a lugares escondidos sino visibles, e incluso en iglesias monásticas en las que se ejerce un continuado control de las obras por parte de los monjes. Además, hay una obra especialmente llamativa por los interrogantes que plantea: el tapiz de Bayeaux que se encuentra en el interior de la catedral de esa ciudad, y con abundantes penes, tanto humanos como equinos, y que fue tejido por mujeres de la familia de Guillermo, Duque de Normandía para conmemorar su conquista de Inglaterra. Se ha querido entender que subraya la virilidad de los conquistadores, pero esa explicación carece de sustento histórico y no es extensiva a los relieves.
                                            Fuente:http://historsex.blogspot.com/2018/10/el-tapiz-de-bayeux-y-sus-enigmaticos.html

    Para otros autores, los relieves buscarían una incitación a la procreación, para aumentar la población diezmada por las malas cosechas, las plagas y las hambrunas. Tampoco tiene sustento firme, debido a que la natalidad en la época de la que hablamos es alta pero la supervivencia de los niños era muy escasa; por eso, aumentar los nacimientos no garantiza el aumento de la población total.

    Inés Ruiz Montejo aventura la interpretación de que son una expresión de la vida popular, ciertamente muy alejada de lo que hasta ahora se nos ha presentado como la vida de la Edad Media, llena de trabajos y de fatigas. Jaime Nuño, de una manera tangencial a esta interpretación, habla de las gentes de la Edad Media como más deudoras del mundo clásico grecolatino que de lo que constituiría la vida dentro del dogma de la Iglesia Católica después del Concilio de Trento. Según este autor, en el mundo plástico del románico permanecen elementos del mundo antiguo, en el que las representaciones del cuerpo humano y del sexo como elemento importante de la vida son características; recordemos el falo como elemento protector que ya utilizaban los griegos en sus hermas en los cruces de caminos o en las puertas.

                                                                                Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Herma

   Incidiendo en la herencia de otras culturas que puedan darse en los relieves románicos, cabe aventurar la posibilidad de que estos canteros fueran de origen mozárabe y que mostraran influencias del Islam, que tiene una visión diferente de la sexualidad, más gozosa.

         5.-  RISUS PASCHALIS
                                               

      Ninguna de las interpretaciones anteriores se sustenta totalmente, y parece que es la de la supervivencia del espíritu clásico la que cuenta con más fundamento. Buscando cómo darle mayor consistencia a la explicación, recordé que Encarna Lorenzo, en este mismo blog y con sus grandes dotes de investigadora, podía ofrecer una nueva perspectiva. Efectivamente, en su entrada  La risa de los dioses y el despertar de la primavera ( en este enlace: https://anthropotopia.blogspot.com/2018/05/la-risa-de-los-dioses-y-el-despertar-de.html ) encontré las ideas que ahora paso a resumir.

       El elemento que hizo a Encarna reflexionar sobre antiguos ritos mistéricos asociados a la risa es una costumbre que pervivió en Galicia hasta los años 40 del siglo pasado: El Domingo de Resurrección, y dentro de los oficios eclesiásticos, el sacerdote hacía muecas y contaba chistes para provocar la risa de los feligreses. En la Alemania barroca estaba la tradición la risus paschalis. Los sacerdotes no solo hacían chistes, sino que contaban historias subidas de tono, generalmente asociadas a adulterios y engaños con fines jocosos; incluso se subían la sotana y enseñaban los genitales, llegando a simular masturbaciones o encuentros sexuales. En el año 852, el obispo de Reims prohibió parte de estas burdas prácticas en el interior de los templos, al igual que las máscaras del demonio. En concilios posteriores se prohibieron más prácticas en este sentido, como danzas de saltimbanquis o gestos irreverentes. Ello demuestra que los templos y los oficios alrededor del año 1000 eran mucho más animados de lo que fueron posteriormente, aunque con la aparición del protestantismo, la Iglesia Católica tuvo que transigir algo más para mantener y atraer a sus fieles.

      Aquí tenemos esa explicación plausible de la presencia de relieves eróticos en los templos románicos. Pero Encarna va más allá y conecta esta vivencia de la risa y el goce con cultos mistéricos anteriores al cristianismo y que este tomó y adaptó. Siguiendo el análisis de Maria Caterina Jacobelli, se puede afirmar que, aunque algunos teólogos asocian esta risa a la alegría de la Resurrección después de los rigores y privaciones de la Semana Santa, hay toda una corriente de ritos que repiten un mismo esquema de crisis - risa - resolución de la crisis, como son:

 1.- En Egipto se cuenta que Ra, dios del sol, a consecuencia de una ofensa, se retiró y dejó al mundo sumido en la oscuridad y el caos. Su hija Hathor, diosa del amor y la alegría, se levanta el vestido y le enseña los genitales, acción que hace reír al dios y volver a salir. La normalidad se restablece tras esa risa.

2.- El rapto de Proserpina por parte de Hades lleva a Deméter a olvidarse de cuidar de las cosechas, de comer y beber. Su sirvienta Iamba o Baubo comienza a decir obscenidades y acaba enseñando sus genitales. La diosa ríe y todo vuelve a la normalidad.


3.- En Japón encontramos la historia de la diosa Amterasu, que se enfada y cierra la puerta de la Estancia Celestial, haciendo que la tierra se cubra de tinieblas. La diosa Ame-no-Uzeme le enseña los genitales, y todo vuelve a la normalidad.

4.- Los mitos de Eleusis en Grecia y las Hilarias en Roma son prácticas que se asimilan a este esquema.

    Con estos ejemplos comprobamos que la secuencia es siempre la misma, y enseñar los genitales provoca una risa que hace que los ciclos naturales se restablezcan y la vida siga su curso. Todas estas celebraciones se llevan a cabo cuando vuelve la primavera, justo cuando el cristianismo estableció la celebración de la Pascua. No es raro que la Iglesia cristiana asimilase fiestas y cultos anteriores, integrándolos en su dogma; el mismo San Gregorio Magno lo recomendaba.

     Por ello, podemos encontrar con esta explicación de los ritos de renovación y resurrección de los cultivos, asociados a dioses paganos, procuradores de la fertilidad y cuyas representaciones y relatos están teñidos de genialidad y sexualidad, que hayan pervivido a lo largo de la Edad Media y encontrasen su expresión en los relieves románicos que nos han ocupado.


FUENTES CONSULTADAS:

  Encarna Lorenzo: https://anthropotopia.blogspot.com/2018/05/la-risa-de-los-dioses-y-el-despertar-de.html
"Las Catedrales del Románico". Historia National Geographic. nº 187

"Sexo y arte erótico campurriano". Mª Paz Delgado. Cuadernos de Campo, 1996

Comentarios

  1. Me ha encantado la entrada en forma de investigación detectivesca, buscando pistas y descartando hipótesis de manera razonada. Pues sí, resulta muy sugerente la explicación que apuntas para estas imágenes grotescas y aparentemente inapropiadas para un espacio sacro: la celebración de la vida, la fertilidad, el retorno de las estaciones, como pervivencia solapada o a duras penas cristianizada de los antiguos ritos paganos. Es muy razonable pensar que el argumento que sirve para un fenómeno como la risa pascual sirva para otras manifestaciones de análoga naturaleza. De hecho, Jacobelli también se refiere en su interesante libro a los capiteles románicos.
    Los símbolos fálicos en las murallas en ciudades de Grecia y Roma, tal como apuntas, eran imágenes de potencia generadora y también un signo para espantar a los enemigos, de la misma forma que los gestos apotropaicos de las divinidades antiguas servían para restaurar el orden cósmico. En un programa muy reciente sobre Mérida como Patrimonio de la Humanidad se enfocaba uno de estos falos protectores, y yo fotografié otro en Ampuria Brava. Es un tema muy interesante. Enhorabuena a la autora.

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    1. Las ceremonias del Risus Paschalis corresponden a tiempos posteriores a las construcciones de las iglesias románicas, casi todas en torno a los siglos XI y XII y por tanto es un argumento inválido. Sin embargo no se ha tenido en cuenta por los investigadores la finalidad APOTROPAICA de las figuras sorprendentes y que arrancan una sonrisa al espectador. Si se sitúan junto al muro de Cervatos, como he hecho yo muchas veces, oirán la risa de los visitantes al ver esas escenas que no son eróticas ni pornográfica sino OBSCENAS.
      En la lectura del blog ROMANICO DIGITAL de la Fundación Santa Maria la Real de Aguilar de Campoo tienen una colección de artículos (iniciados años antes en un foro hoy cerrado de Amigos del Romanico: "el sexo protector") en los que se citan a importantes antropólogos que ayudan a entender el uso de esas imágenes para proteger a los vivos que iban a la iglesia y a los difuntos enterrados en su entorno.

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